Muchas de las cuevas que estuvieron ocupadas por los antiguos canarios siguieron utilizándose en épocas posteriores a la Conquista, incluso en la actualidad, como lugares para guardar el ganado, almacenamiento, como viviendas, etc. Sin embargo, aún podemos observar elementos característicos de la época indígena dentro de algunas de esas cuevas, y en este caso hablaremos de la pintura.
Son varios los ejemplos de cuevas pintadas que aparecen en Gran Canaria, donde el pigmento más utilizado para este tipo de decoración era el rojo, extraído del almagre, aunque también se utilizó el blanco (haloisita) o el negro (sacado por combustión).
Algunos escritos antiguos nos hablan de que eran las mujeres las encargadas de realizar este tipo de decorados dentro de las cuevas y viviendas, pero habría que preguntarse hasta qué punto estaríamos ante un simple adorno o ante algo de un carácter más simbólico. En la Cueva Pintada de Gáldar parece que hay poco margen para la duda en este sentido, pero en otras cuevas donde sólo nos quedan algunas franjas pintadas de rojo la interpretación puede ser distinta.