Entre 1520 y 1528 se construye la ermita de San Sebastián en Santa María de Guía, situada junto al Barranco de Las Garzas. Sabemos de su existencia en fechas tan tempranas por el testamento de Pedro Báez, natural de Villareal en Portugal, que trabajó en el ingenio blanco de los Riveroles.
Lo interesante de esta ermita es el lugar donde fue erigida, ya que bajo sus cimientos se encuentra una cueva que fue reutilizada como estanque. No es la primera vez que en Gran Canaria se edifica una ermita sobre una cueva; recuerden la ermita de San Gregorio que bajo sus pies tiene una cavidad indígena de carácter ritual con cazoletas y canalillos. Y también recordemos otras ermitas que han sido construidas en medio de poblados de los antiguos canarios. Por lo que la cueva que se encuentra en Guía puede que tenga más importancia de la que pensamos en la actualidad. Aunque de momento no podemos saberlo a ciencia cierta.