En otras ocasiones ya hemos hablado sobre la necrópolis de Maipez de Arriba, en Agaete. Sin embargo, más cerca de la costa y de igual importacia (aunque ya desaparecida debido a la urbanización de la zona), se encontraría situada otra necrópolis indígena, conocida como el Maipez de Abajo.
Uno de los hallazgos más sorprendentes de este lugar, y único hasta el momento en la Historia de Canarias, fue el de un ataúd de madera realizado mediante el vaciado de un tronco de pino, que fue datado en una fecha que estaría entre el 1016-1169 d.C. En su interior se encontraron los restos de una persona adulta y restos de fibras vegetales que probablemente formarían parte de la mortaja que envolvía el cadáver, como se ha constatado que también ocurría en otros enterramientos.
Este individuo muy posiblemente pertenecía a la élite de la sociedad canaria, pues podemos saber en palabras del cronista Abreu Galindo: "Algunos nobles enterraban en ataúdes de cuatro tablas de tea y las pilas mucho mayores y de mayores piedras". Hoy en día dicho ataúd se encuentra guardado en el Museo Canario.